(((( ⭕#RADAR360 ))))
Los niños al abrigo de Cristo son como pequeñas semillas que crecen en el jardín de la fe. Como un árbol que se fortalece con raíces profundas, su corazón encuentra refugio en el amor y la protección de Jesús. En ese abrazo divino, florecen con la esperanza, la inocencia y la confianza.
Así como un niño confía plenamente en sus padres para cuidar de él, los niños al abrigo de Cristo confían en la guía y el amor de su Salvador. En sus ojos brillantes, podemos ver la luz de la fe, la chispa de la eternidad.
Cada uno de nosotros, sin importar la edad, puede aprender de la fe de estos niños. Recordemos siempre volvernos como niños en nuestro corazón y abrazar el amor y la protección que Cristo ofrece. En su abrigo, encontramos la verdadera paz y la alegría que el mundo no puede dar.